Un excelente directivo debe ser capaz de ‘reconocer los talentos con buen ojo’. Sólo cuando los gerentes tienen la capacidad de reconocer a las personas pueden utilizar su destacada visión para descubrir talentos sobresalientes para la empresa, inyectar sangre fresca al equipo y permitirles ejercer plenamente su valor y papel únicos en el equipo.
Esta prueba puede comprobar si tiene la capacidad de un buen gerente para reconocer a las personas.